El mundo del espectáculo argentino está de luto por el fallecimiento de Antonio Gasalla, reconocido actor y humorista, a los 84 años. Gasalla, cuya salud se había deteriorado en los últimos años debido a una demencia senil diagnosticada en 2019, dejó una huella imborrable en el teatro, cine y televisión de Argentina. 

Nacido el 9 de marzo de 1941 en Buenos Aires, Gasalla estudió en la Escuela Nacional de Arte Dramático, donde conoció a Carlos Perciavalle, con quien formaría una dupla emblemática en el café-concert argentino. Su primer gran éxito llegó en 1966 con "Help Valentino", junto a Perciavalle, Edda Díaz y Nora Blay, espectáculo que sentó las bases del café-concert en el país. 

A lo largo de su carrera, Gasalla creó personajes icónicos que reflejaban con humor y crítica la idiosincrasia argentina. Entre ellos destacan "La Abuela", "Flora, la empleada pública" y "Soledad", que se convirtieron en referentes del humor nacional. Su talento lo llevó a protagonizar la película "Esperando la carroza" en 1985, donde interpretó a "Mamá Cora", personaje que se convirtió en un clásico del cine argentino. 

En televisión, Gasalla brilló con programas como "El Palacio de la Risa" y "Gasalla en pantalla", donde desplegó su versatilidad y capacidad para retratar la realidad social con humor ácido e inteligente. Su trabajo le valió múltiples premios, incluyendo el Martín Fierro de Oro en 1994. 

En los últimos años, su salud se vio afectada por una demencia senil que lo alejó de los escenarios y de la vida pública. A pesar de ello, su legado artístico perdura y su influencia en el humor argentino es innegable. La comunidad artística y su público lo recordarán siempre por su talento, creatividad y capacidad para hacer reír y reflexionar a varias generaciones.

La partida de Antonio Gasalla deja un vacío en la cultura argentina, pero su obra y personajes seguirán vivos en la memoria colectiva, recordándonos la importancia del humor como espejo de la sociedad.