Wanda Nara no descansa y su vida amorosa tampoco. Mientras en las redes intenta mostrarse enfocada en sus proyectos, el último fin de semana la empresaria quedó en evidencia: ya no se oculta con su flamante vecino de Nordelta, Martin Migueles, socio de Elías Piccirillo, y juntos armaron una agenda que dio más que hablar.
Por Redacción
El sábado arrancó con todo: cumpleaños de Zaira, luces, música y la primera aparición oficial de Wanda con su nuevo compañero. Los que estuvieron en la fiesta aseguran que las miradas y las risitas entre ellos eran imposibles de disimular.
El domingo, lejos de la noche y el ruido, llegó el plato fuerte: almuerzo en la casa de él y con invitada de lujo, nada menos que Nora Colosimo, la mamá de Wanda. ¿Casualidad? Para nada. Todo indica que la presentación en familia ya es un hecho y que el vínculo va tomando forma más rápido de lo que se imaginaba.
Pero la frutilla del postre fue a la noche: juntos en el show de Lali Espósito. Perfil bajo, sí, pero igual llamaron la atención. Entre selfies, bailes y comentarios al oído, dejaron en claro que lo suyo ya no es un simple rumor de pasillo en Nordelta.
Con este triple plan, Wanda vuelve a dar titulares: nuevo galán, aprobación materna y exposición pública. ¿Estamos frente a un romance que llegó para quedarse o será otro capítulo fugaz en la novela interminable de la mediática.
La iniciativa, presentada por los diputados Juan Manuel Valdés y Victoria Montenegro, fue aprobada por unanimidad. El acto de entrega del diploma se realizó en el Salón San Martín de la Legislatura Porteña y estuvo encabezado por el propio Valdés, presidente de la Comisión de Discapacidad.
Hay temas que explotan en los medios y se convierten en tormentas fugaces: ardientes, ruidosas, exageradas. Pero cada tanto aparece un caso que permite observar algo más profundo, algo que incomoda porque nos devuelve un espejo. No sobre la farándula, no sobre los egos, no sobre el show.