El siguiente texto podría ser un cuento de ficción, pero sucedió de verdad. La increíble historia del empresario vecino de Wanda Nara que huyó por las dudas.
Por Redaccion
El señor "x" es un empresario muy conocido en el mundo de las finanzas, dueño de una 'cueva' que alterna operaciones legales con la 'no tanto'. Y un hombre que, por precaución o simple paranoia, siempre tenía un plan de escape listo. Vive en uno de los pisos más altos de Chateau de Nuñez. Si, exacto, el mismo que vive Wanda.
El pasado viernes, ya con los mercados financieros cerrados y nadie a quien garcar, degustaba un vino carísimo en su balcón y revisaba sus inversiones desde su celular. Hasta que divisó a lo lejos las inconfundibles luces azules de las sirenas de los patrulleros acercándose a su edificio. No era común ver tanta policía en esa zona. Y "x", con su naturaleza desconfiada, de inmediato pensó lo peor: "Vinieron por mí."
Su instinto de supervivencia se activó. Sin pensarlo dos veces, se dirigió a su plan de escape. Corrió al vestidor, se puso una gorra, gafas oscuras y un abrigo largo. Llamó a un amigo que vive en el mismo edificio y le pidió que lo saque de ahi. Se juntaron en las escaleras de emergencia en lugar del ascensor, no sin antes meter en su mochila un fajo de billetes y algún papel importante que mejor no lo vea nadie, porque nunca se sabe.
Mientras tanto, en el lobby del edificio, la policía no estaba preguntando por él. En realidad, estaban allí porque en uno de los pisos intermedios se había desatado un escándalo entre el futbolista Mauro Icardi y su expareja, Wanda Nara.
Pero mientras los agentes estaban "en otra", nuestro "x" ya había activado su escape. Se subió al auto del amigo, le pidió que apague su celular y salieron por el acceso a proveedores de la cochera, esquivando las cámaras de seguridad como si fuera un espía profesional.
A toda velocidad por Av. Del Libertador, cruzaron Gral. Paz hasta el estacionamiento del Carrefour de Olivos donde lo estaba esperando una camioneta con chofer. Se pasó de vehículo, despidió al amigo y se fue a esconder a un country de zona norte.
Cuando llegó a la casa, prendió la tele. Esperaba ver su rostro en todos los noticieros con alguna frase tipo "financista prófugo" o algo asi. Pero lejos de encontrarse con eso, su sorpresa fue aún mayor.
"Escándalo entre Mauro Icardi y Wanda Nara en el Chateau."
"Mauro fue con las nenas a devolver a los perritos. Llegó la policia."
"X" parpadeó. Leyó de nuevo. Se dió cuenta que además de garca era un pelotudo.
—¿No era por mí? ¡¡No era por mi!!
Se quedó en silencio un momento. Miró por la ventana y se abrió otro vino, con la tranquilidad que en este país los únicos que van presos son los boludos.