La Policía irrumpió en un hotel de Balvanera y atrapó a nueve sospechosos acusados de protagonizar el millonario robo a la casa de Pampita Ardohain, ocurrido mientras la modelo trabajaba en Europa.
Por Redacción
El procedimiento se desarrolló en plena avenida Callao, a metros del Congreso, donde los investigadores dieron con el supuesto “refugio” de la banda. En las habitaciones del hotel encontraron joyas, carteras de lujo, dinero en efectivo, autos y herramientas de robo. Todo apunta a un grupo organizado que venía operando con precisión quirúrgica.
Los arrestados sorprendieron por su procedencia: seis chilenos, un colombiano, un venezolano y la madre de este último. Dos de ellos arrastraban pedidos de captura internacional y todos habrían ingresado legalmente al país, aunque sin antecedentes. Según fuentes oficiales, funcionaban como un engranaje delictivo aceitado, con roles definidos y una logística milimétrica.
El atraco fue de película: los delincuentes escalaron el muro trasero, usaron reposeras de la pileta como improvisada escalera, rompieron un vidrio e irrumpieron en la planta baja. Estuvieron adentro de la casa seis horas completas, revolviendo cada rincón en busca de tesoros. Se llevaron carteras de diseñador, lentes exclusivos, joyas, efectivo y hasta una caja fuerte entera que cargaron en una Volkswagen Suran preparada para la ocasión.
La fuga fue igual de planificada: tres autos en paralelo, una patente adulterada y recorridos distintos para despistar. Sin embargo, un detalle —un vehículo que no cambió su dominio— terminó delatando a la banda y puso a la policía sobre la pista.
Entre lo recuperado, apareció un tesoro que para Pampita no tiene precio: cuatro viejos teléfonos con recuerdos de su hija Blanca, fallecida en 2012. Esos dispositivos, guardados en la caja fuerte, contenían fotos y videos familiares de enorme valor sentimental. El abogado Fernando Burlando confirmó la emoción de la modelo al saber que esas piezas volvieron a sus manos.
La causa, a cargo de la Fiscalía Nº 48, sigue abierta. Los investigadores intentan determinar cómo la banda supo que Pampita estaría fuera del país y si contaron con cómplices desde adentro.
Lo que parecía un simple robo se transformó en un caso que mezcla glamour, drama y crimen organizado, con un botín millonario y un recuerdo familiar recuperado casi de milagro.
La Policía irrumpió en un hotel de Balvanera y atrapó a nueve sospechosos acusados de protagonizar el millonario robo a la casa de Pampita Ardohain, ocurrido mientras la modelo trabajaba en Europa.