La medida ordenaba que el futbolista pudiera reencontrarse con las niñas este viernes a las 11:00, pero Wanda Nara incumplió el mandato, lo que desencadenó un operativo inédito en el exclusivo complejo de Núñez.
Por Redacción
Tras más de 9 horas de máxima tensión, Mauro Icardi logró retirarse esta noche del edificio Chateau Libertador junto a sus hijas, Francesca e Isabella, luego de una extensa intervención policial y judicial para hacer cumplir una orden del juez Eduardo Hagopian.
La Justicia autorizó expresamente el uso de la fuerza pública, el ingreso al domicilio e incluso la ruptura de cerraduras si fuera necesario. También se contempló la presencia del SAME ante una posible crisis emocional, ya que se preveía un fuerte nivel de resistencia por parte de la mediática.
Pasadas las 15:30, dos patrulleros y agentes de la Superintendencia de Violencia Familiar y de Género se presentaron en el lugar. Testigos presenciales confirmaron que Wanda se atrincheró en el departamento junto a sus hijas, llorando y gritando que “las nenas no quieren ir con su papá”. Una de ellas incluso fue escuchada diciendo “no quiero ir” entre lágrimas, mientras personal policial intentaba mediar la situación.
Ante la negativa persistente, la Policía le notificó a Wanda que, si continuaba impidiendo el cumplimiento de la resolución judicial, podía quedar detenida por entorpecer el accionar de la Justicia. Esa advertencia resultó decisiva para destrabar el conflicto.
Finalmente, alrededor de las 21:15, Mauro Icardi salió del edificio con las dos menores, tras más de nueve horas de drama. Lo hizo sin hacer declaraciones y rodeado de personal de seguridad, dejando atrás un episodio cargado de tensión, gritos y forcejeos emocionales.
Mientras tanto, los vecinos del exclusivo complejo Chateau manifestaron su profundo malestar por la situación. Aseguraron estar “hartos” de tener periodistas apostados todo el día en la puerta, cámaras invadiendo la privacidad y un flujo constante de extraños mirando cómo entraban y salían del edificio. “No se podía ni pasar con el auto, esto es una locura”, dijo uno de los residentes, visiblemente indignado.
Este nuevo capítulo en la guerra entre Wanda e Icardi expone no sólo el nivel de conflictividad entre ambos, sino también el impacto que sus disputas generan en terceros. Por lo pronto, Icardi ya está con sus hijas. Pero todo indica que esta historia está lejos de terminar.
La medida ordenaba que el futbolista pudiera reencontrarse con las niñas este viernes a las 11:00, pero Wanda Nara incumplió el mandato, lo que desencadenó un operativo inédito en el exclusivo complejo de Núñez.
En medio de una disputa judicial cada vez más tensa, el futbolista expresó su enojo tras conocer la resolución del juez que le permite ver a sus hijas el próximo domingo, Día del Padre, pero bajo condiciones que el futbolista considera inadmisibles.